9.17.2008

Corrido de los pueblos de Morelos


Corrido Esdrújulo a Ulises Nájera


9.15.2008

La trova tradicional suriana

El corrido tradicional suriano es un producto cultural mestizo con influencias de todas las culturas que han habitado esta región. En la tradición trovadoresca del estado de Morelos, observamos que la filosofía y literatura nahua convive con la greco-latina occidental, de igual forma sucede con el sistema tonal de la música europea ya que fue adoptada por la cultura indígena imprimiéndole su sello. Lo mismo sucedió con la influencia de otras culturas como la africana, es por estos influjos, que la canción suriana es un conglomerado de géneros, que en otros tiempos fueron independientes, como tangos, danzones, marchas, danzas, valses, mazurcas, etc., pero que nos llega como un todo denominado simplemente corrido.
La diferencia entre el corrido norteño y suriano estriba en que en el primero predomina el virtuosismo instrumental y generalmente se baila. En cambio, en el segundo lo más relevante es la complejidad literaria y aunque anteriormente se bailaba en el presente se ha perdido esa costumbre, el corrido suriano es sólo para escucharlo con atención.
En la versificación suriana, los cuartetos octosilábicos son pocos comunes. En su lugar encontramos cuartetos, quintetos (que los trovadores surianos llaman quintillas), sextas, séptimas y octavas todas escritas en el arte mayor y verso compuesto de hasta diecisiete sílabas. Es curioso, pero no se conocen décimas en ninguna de sus variantes. En su lugar encontramos corridos cuya primera estrofa es un cuarteto, mientras la segunda es una sexta. Sin embargo, la estructura de la versificación no tiene nada que ver con las décimas. Debido a esta complejidad en su versificación. Y en el tratamiento poético de su temática, la trova tradicional de Morelos, es considerada como una de las más eruditas de América Latina.
La región en donde se componía y se canta en los estilos citados anteriormente, comprende los estados de Morelos, México, Guerrero, Puebla, Tlaxcala, Oaxaca y Michoacán. En estos dos últimos estados solo se incluyen poblaciones limítrofes con Guerrero.
En el ocaso del siglo XIX y en el alba del XX, el corrido suriano vivió un gran esplendor. En el estado de Morelos nacieron y vivieron varios compositores como: Juan Montes, Ignacio Trejo, Marciano Silva, Federico Becerra, Epigmenio Pizarro y muchos más a los que se les agregarían, Félix Cruz, Fermín Aponte y Agapito Rodríguez del estado de Guerrero y también José Tapia del Estado de México. Todos ellos fueron poetas de gran talla y sabiduría.
En la lucha revolucionaría de la segunda década del siglo XX, el corrido tuvo un papel relevante como vehículo de información. Existen indicadores que confirman la participación de poetas como Marciano Silva y Elías Domínguez en la revolución. Estos cantores describen con gran destreza literaria los horrores que sembró el ejercito federal entre la población morelense con el pretexto de destruir al Ejército Libertador del Sur. Con la guerra Morelos se despobló, y hubo que rehabitarlo con personas procedentes de otros estados. Estas circunstancias unidas a la aparición de la radio, la televisión y la producción masiva de discos, daño por completo la continuidad de la tradición del corrido suriano en el estado de Morelos. Noventa años después de la guerra, esta región vive actualmente un proceso de reestructuración de su cultura.

Jesús Peredo